La soledad baila dentro de nuestros huesos la marcha fúnebre de la luz.
El significado siempre huye.
Cuando uno está muriendo lo último que le interesa es una moral anémica.
El poema es una vorágine sin rendición ni coartada.
Los humanos sólo sirven para construir redes de información; los monstruos sirven para romper esas redes.
El bien es parte de la estrategia del mal.
El espectador es el único que hace valiosa la obra.
Todo hombre es pendejo, pequeño, estúpido y manipulable cuando se enamora. Es decir, la peor escoria que hay.
Escribir, ese acto, tan primitivo, de esculpir las entrañas.
Es delgada la línea entre el imbécil y el genio.
Si el tiempo es cíclico, añorar el pasado es una postura vanguardista.
La escritura la veo como herida abierta, cuando uno arroja la pus. La cicatrización la veo como la parte final, como meditación
La cicatrización precisamente consiste en nutrir el alma.
Yo los admiro más, la verdad, por lo buenos lectores que puedan ser que por lo buenos escritores que puedan ser.
Lo triste de la iluminación es que siempre llega cuando ya no sirve pa' nada.
La compasión es un ejercicio de la imaginación; por eso suelen ser los artistas los más solidarios.
La literatura es lo más maravilloso del mundo. Por eso es un error tomársela en serio.
Yo tengo muy buenos amigos debido a que nunca espero mucho de ellos.
Seamos sinceros: los únicos que hacen realidad sus sueños son los asesinos seriales.
Los ociosos somos los únicos que no le hacemos mal a nadie; nos da hueva.
No importa si has cambiado el paradigma del pensamiento científico y humanista del siglo XXI, también harás fila para las tortillas.
Yo, pese a mí mismo, lo único que puedo prometer es olvido.
El silencio es ruido esculpido.
Mi venganza será no hacerme daño.
Es un infierno no poder dejar de pensar, así como lo es no hacerlo nunca.
Para amar verdaderamente se ocupa una buena dosis de maldad.
La muerte está adosada a la vida ¿y qué? Eso nos sirve para tener conciencia.
Siempre han sido los dizque morales los que aplauden la quema pública de personas.
Ser mancha, pero imborrable.
Dos cuerpos al hacer el amor están infinitamente juntos e infinitamente separados; es un encuentro que pierde, una caricia que huye.
Lo que me gusta de los disfraces es lo que revelan
La muerte, esa gran sabia, nos pone a todos en donde nos corresponde.
El sexo: una alucinación de la música.
Hay verdades que aprietan el gatillo antes de que podamos escapar.
La música es la piel del alma
Los hombres son, por general, demasiado débiles como para ser malvados.
Lo más ocioso, con mucha frecuencia, es lo más inteligente
Mientras más pronto aceptemos nuestra naturaleza, menos sufriremos.
La sabiduría es, por antonomasia, la anormalidad.
El amor nos enseña otras medidas, en donde se implican más abismos que relojes.
Un error tan espantoso que casi parece acierto.
También están los que se hacen de enemigos débiles porque ellos mismos son débiles.
No me interesan los méritos, me interesa saciar, egoístamente, mi curiosidad.
El monstruo, para mí, es el que va más allá de lo humano, el que desborda los convenios sociales, el anormal, el loco, el genio.